Un grupo de científicos reveló que cuanto más alcohol toma una persona, más se encoge su cerebro.
Los investigadores del Wellesley College en Massachusetts querían saber si el consumo de bebidas alcohólicas también protegía contra la pérdida inevitable de volumen cerebral que experimentan las personas a medida que envejecen; pero comprobaron que no es así.
De hecho, los abstemios longevos tenían la menor pérdida de volumen cerebral, mientras que los ex bebedores, los consumidores moderados de alcohol y los que tomaban grandes cantidades de éste, experimentaron más achicamiento cerebral progresivo.
La tendencia era más pronunciada en las mujeres que en los hombres. Esto podría deberse a la mayor sensibilidad femenina a los efectos del alcohol y a su menor tamaño en promedio, comparado con los varones.
La muestra se basó en mil 839 estadounidenses de entre 33 y 88 años que informaron su consumo de alcohol y se sometieron a resonancias magnéticas.
Comparadas con los abstemios, las personas que más tomaban (más de 14 bebidas por semana), tenían el cerebro un 1 por ciento más chico, reveló el equipo.
En general, el volumen cerebral disminuye con la edad a una tasa estimada del 2 por ciento por década, indicaron los expertos.
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